Xataka
Contenidos contratados por la marca que se menciona.

+info

Los avances tecnológicos están transformando la sociedad a velocidades de escándalo. No solo están creando nuevos modelos de negocio y puestos de trabajo, sino también nuevas formas de entretenimiento. Aquí es donde entra la RV, uno de los mayores avances de los últimos años. Y hay que decir que, quien piense que la cosa todavía está cocinándose, está muy equivocado. La RV marcha a toda vela y está claro que aún falta lo mejor.

2015 y 2016 nos quedan ya lejos; fueron dos años clave para la RV ya que vieron nacer la mayoría de dispositivos que nos permitirían sumergirnos en estos mundos paralelos. Aunque 2017 y 2018 fueron años bastante tranquilos, esta tecnología fue corrigiéndose para llegar hasta donde está ahora.

La RV no solo ha evolucionado a mejor, sino que con ella lo han hecho todos los dispositivos orientados a disfrutarla. Las gafas RV han rebajado sus precios y sus requerimientos técnicos siguen siendo perfectamente superables con un buen equipo que no te cueste un riñón.

Los requisitos no son tan altos

Si queremos hacernos con un ordenador capaz de soportarla, tenemos que fijarnos principalmente en la gráfica, el procesador y la RAM. No podemos olvidarnos de que crear todo un mundo virtual es un reto técnico importante, por lo que la tasa de refresco necesaria será mucho mayor de lo habitual.

Si esta tasa es correcta se producirá el molesto mareo que hasta hace un tiempo todavía seguíamos sufriendo al jugar con RV. Las Oculus Rift y las HTC Vive funcionan con una tasa de refresco de 90Hz, por lo que es más que comprensible que necesitemos una gráfica potente que nos deje disfrutar al máximo.

Hay fabricantes que piensan en RV a la hora de fabricar sus equipos. Un buen ejemplo lo encontramos en HP con su nuevo OMEN Obelisk. En el CES de principios de este año HP presentó su nueva versión mejorada de este sobremesa gaming. Incorpora una NVIDIA RTX 2080Ti, una nueva gama de gráficas que actualmente es la más potente del mercado.

La tasa de refresco unida a la resolución hacen imprescindible que nuestro equipo cuente con un procesador a la altura. Para que seamos conscientes, un juego con resolución 1080p a 60Hz necesita procesar 124 millones de píxeles por segundo. Un juego de Oculus llegaría hasta los 400 millones con una resolución de 20160×1200.

Está claro que necesitamos un componente capaz de llegar hasta ahí, y el OMEN Obelisk cuenta con un Intel Core de hasta novena generación (i9-9900K). Con algo así no tendríamos que preocuparnos por nada, sobre todo teniendo en cuenta los requisitos mínimos de las dos grandes gafas del mercado que ya venimos nombrando: Oculus Rift y HTC Vive.

Funcionan bien con una GTX 1050 y 1060 respectivamente, no tendrán problemas con un Intel i3-6100 y un i5-4590 y en cuanto a la RAM, las HTC necesitan solo 4GB, la mitad que sus contrincantes.

Es fácil hacerse con un equipo preparado para la RV y por un precio bastante asequible. De hecho, este auge queda claro con solo fijarse en la cantidad de juegos que van a llegar este año.

Títulos y más títulos

Por destacar alguno de los muchos que van a llegar, se espera que Twisted Pixel lance Defector para Oculus Rift, un juego donde nos sentiremos el mismísimo James Bond. Disparos, persecuciones, saltos desde aviones… este juego promete ser una de las grandes revelaciones en RV este año, aunque todavía no conocemos su fecha exacta de llegada.

Respawn también va a lanzar un juego de VR para Oculus, pero todavía desconocemos su título y su fecha de lanzamiento. Eso sí, se espera que sea un shooter bélico y, a pesar de que no va a ser Titanfall VR la cosa promete.

Este año también podremos ver lo nuevo de BigBox VR, que se han atrevido con un Battle Royale disponible para Oculus y Vive, Population: One. Sí, sí, se trata de un juego al más puro estilo Fortnite: se puede construir, disparar, volar con jetpacks y todo lo que se te ocurra. Habrá que ver qué tal sale la cosa, pero desde luego que pinta muy bien.

Vuelve a nuestras Oculus Lone Echo, el juego de Ready at Down que nació en 2017 y que es todo un must para los VR lovers vuelve con una segunda entrega. Solo hemos nombrado unos pocos, pero este 2019 van a ver la luz un montón de títulos nuevos tanto para Oculus Rift como para HTC Vive. Un indicador más de que la VR está en pleno apogeo.

Hacia dónde va el asunto

Aunque a día de hoy la RV se encuentre a pleno rendimiento, todavía le queda mucho recorrido. Dentro del mundo de los videojuegos, cada vez surgirán más títulos interesantes que apuestan por estas realidades paralelas. Incluso se espera que aparezcan más modelos de gafas y que las ya existentes se adapten a consolas y nuevos dispositivos móviles.

Lógicamente los dispositivos seguirán intentando mejorar para evitar todavía más la cinetosis (el famoso mareo), una molestia que todos sufrimos aunque a diferente nivel, los dolores de cabeza y otro tipo de efectos que la RV produce. Y aquí entra también la aparición de cada vez más accesorios. Ya se usa un artilugio parecido a una máquina de correr que nos permite tener una experiencia totalmente móvil, por ejemplo. Aún así, y al más puro estilo Ready Player One están por llegar tal vez trajes o guantes que nos permitan interactuar con el mundo y mejorar aún más la experiencia inmersiva.

Lo verdaderamente interesante aquí es que se espera que en unos años la RV no solo se considere para el mundo del entretenimiento; sus aplicaciones en el mundo de la educación tienen cada vez más peso y sin duda van a evolucionar logrando mejorar la calidad del aprendizaje, pero no solo ahí: medicinasimulación de conducción, viajes… la RV se puede aplicar a casi cualquier cosa, y que no nos extrañe que su uso se normalice de aquí a un tiempo y pronto forme parte de nuestro día a día.

Imágenes | OMEN